Era uno de los cocineros más importantes del mundo, estrella televisiva gracias a sus programas de cocina. Se encontraba en Francia trabajando para su próximo programa.
El popular chef estadounidense Anthony Bourdain, de 61 años, se suicidó hoy en Francia, informó la cadena televisiva CNN para la que trabajaba.
“Es con extraordinaria tristeza que podemos confirmar la muerte de nuestro amigo y colega Anthony Bourdain”, indicó la CNN en un comunicado, en el que confirmó que la causa de la muerte fue un suicidio.
Bourdain estaba en Francia trabajando en un próximo programa sobre Estrasburgo y su amigo Eric Ripert, chef francés, lo encontró sin conocimiento en su habitación de hotel.
Después de una intensa trayectoria como cocinero en diversos restaurantes en Nueva York, entre ellos Brasserie Les Halles en Manhattan, Bourdain escribió sus memorias “Kitchen Confidential: Adventures in the Culinary Underbelly” (Confidencias de cocina: aventuras en el vientre culinario) y comenzó su exitosa carrera televisiva.
En 2005, su programa “No Reservations” comenzó a emitirse en el canal de viajes Travel Channel, con el rápidamente se hizo muy popular, en viajes por todo el mundo descubriendo nuevos platos y bebidas y con el que ganó dos premios Emmy.
En 2012 amplío su audiencia al pasar a la CNN con su nuevo programa de televisión “Parts Unknown”, en el que llegó a entrevistar al presidente estadounidense, Barack Obama, durante su visita a Vietnam.
El chef recibió en 2013 el premio Peabody por “expandir nuestro paladar y horizontes en igual medida”.
Su paso por Argentina
Bourdain visitó en 2016 Buenos Aires para uno de sus episodios del programa “Parts Unknown”, en el que mostró su gusto por la gastronomía local, desde la que puede experimentarse en lujosos restaurantes o en un choripán al paso.
Pasó por el restaurant Don Carlitos, con su colega Francis Mallmann, saboreó un choripán y, en una capital calurosa en enero se sentó en una reposera en la Costanera para ver aterrizar los aviones en Aeroparque, mientras tomaba un aperitivo.
“Después de una semana o dos por aquí confirmé que hasta los carnívoros como yo se arrodillarán rezando por algún vegetal”, ironizó.
También destacó: “el delicioso, delicioso choripán es una comida callejera icónica por aquí, por razones que resultan inmediatamente obvias una vez que mordés uno”.